La digitalización de productos, servicios y procesos es una tarea pendiente para muchas empresas. En el mercado actual encontramos dispositivos médicos como los audiómetros digitales que incorporan tecnología de información y comunicaciones (TIC), cuya transformación ya es una realidad.

Innovación en el sector médico con audiómetros digitales

La audiometría es la prueba que evalúa la capacidad de una persona para escuchar sonidos. Para que el examen sea posible, es necesario un audiómetro que realice el test auditivo y registre los resultados. En la actualidad, la mayoría de audiómetros que encontramos en el mercado son manuales y no suelen estar conectados a los sistemas de gestión de información de pacientes. Y los que lo hacen, se basan en una tableta a la que hay que añadirle un equipo de audiometría sin pantalla que encarece el dispositivo. La rigidez de la legislación (normativas regulatorias) sobre tecnología sanitaria dificultan avanzar en la modernización de los dispositivos médicos. No obstante, haciendo frente a este escenario, Kiversal apostó por marcar la diferencia con una solución innovadora.

Es el caso de Audixi 10, el primer producto diseñado y fabricado por Kiversal, que permite la automatización de la gestión y realización de pruebas audiométricas.

¿Por qué escoger un audiómetro digital TIC?

Una de las principales ventajas de digitalizar una audiometría es el ahorro de costes, utilizando las soluciones TIC, ya que resulta ser una solución más productiva, económica y segura.

Otra característica que permiten las soluciones TIC es simplificar la gestión del mantenimiento del audiómetro, que es incómoda porque el dispositivo debe enviarse al fabricante cada 1 o 2 años para que lo calibre y provoca una suspensión del uso examen auditivo durante una o dos semanas. Un audiómetro digital TIC, en cambio, puede incorporar sistemas de autocalibración.

También es una ventaja la realización de audiometrías automáticas, que siguen el procedimiento médico de forma exacta y desatendida.

Además, utilizando las tecnologías táctiles que incorporan dispositivos tan habituales como los smartphones y las tabletas, el funcionamiento del dispositivo necesario para realizar la audiometría suele ser más intuitivo y guiado, ya que adapta la interfaz del usuario a las estrictas necesidades del procedimiento médico.

Cabe destacar la obtención de datos consolidados en formato digital, fácilmente transmisibles a otros dispositivos y conectados a internet, que permite poder consultarlos cuando se desee.

Aprovechar las ventajas que aporta la tecnología digital aplicadas a un dispositivo médico, mejoran la eficiencia y productividad del personal sanitario. Por esta razón, es recomendable que el especialista trabaje con un dispositivo que permita la realización de una audiometría digital TIC, con la que pueda ahorrar tiempo, recursos y obtener unos resultados cualificados.