La desnutrición durante la infancia puede ser un factor clave para desarrollar una pérdida auditiva de adulto. En este artículo te explicamos qué ocurre si un joven está malnutrido y qué tipo de alimentos son perjudiciales para la salud auditiva.

Las graves consecuencias de la malnutrición infantil

La nutrición es esencial para el desarrollo humano y una de las bases de la salud. Una alimentación saludable es imprescindible en todas las etapas de la vida, pero es aún más significativa durante la infancia ya que es cuando empezamos a desarrollar los órganos de nuestro cuerpo. Las disfunciones ocurridas a una edad temprana acarrearán problemas a lo largo de la vida adulta.

Si desde pequeños no seguimos la pirámide nutricional o alimentaria, basada en la ingesta de frutas, vegetales, cereales y proteínas, nos volveremos susceptibles a infecciones, bacterias y virus a causa de la debilidad del sistema inmune. Por consiguiente, si estas infecciones se originan en el oído y se producen de manera continuada, también podrán derivar en pérdidas de audición.

La pirámide nutricional o alimentaria, basada en la ingesta de frutas, vegetales, cereales y proteínas.

Credit photo: Sociedad Española de Nutrición Comunitaria

Por eso, debemos hacer hincapié a diario en fomentar los hábitos saludables en la infancia para mantenerlos en la edad adulta: llevar una dieta equilibrada y sana, hacer ejercicio regularmente, descansar las horas adecuadas (se recomienda dormir mínimo 7-8 horas al día) y mantener una buena higiene auditiva. También debemos evitar la exposición a ruidos intensos de manera continuada y, ante cualquier problema auditivo, acudir al especialista.

¿Qué es la malnutrición?

La malnutrición se puede definir como una nutrición deficiente, con excesos o desequilibrios en la ingesta de nutrientes que a corto y largo plazo causa diversos problemas de salud:

  • Retrasa el crecimiento y desarrollo humano
  • Puede provocar sobrepeso, diabetes o enfermedades cardiovasculares como el infarto de miocardio o accidentes cerebrovasculares
  • Puede acabar derivando en desnutrición y, por lo tanto, conllevar una pérdida de reservas o debilitar el organismo, ya sea por ingerir poca o mala alimentación
  • Aumenta la morbilidad y las muertes prematuras en niños y madres

Cabe destacar que el 33% de niños en España sufre malnutrición según UNICEF. Una cifra muy preocupante si tenemos en cuenta estudios recientes que vinculan la desnutrición con la pérdida auditiva.

Una investigación de la Universidad Johns Hopkins Bloomberg School of Public Health en Estados Unidos sostiene que los jóvenes desnutridos durante la primera infancia tienen el doble de posibilidades de padecer problemas auditivos. El estudio concluye que la desnutrición infantil puede afectar al correcto desarrollo del oído interno, y, por lo tanto, puede acabar provocando pérdida de audición en edades adultas.

Evita alimentos perjudiciales para tu salud auditiva

Después de estudiar qué alimentos fortalecen tu sistema auditivo en nuestro blog, te recomendamos que prestes atención en aquellos que, por el contrario, perjudican tu salud auditiva:

  • Grasas saturadas y alimentos ultraprocesados: alimentos con grasas industriales que no aportan nutrientes de calidad.
  • Azúcares o carbohidratos: un consumo excesivo de estas sustancias puede acabar provocando diabetes e hipertensión, afecciones que podrían derivar en pérdida auditiva.
  • Cafeína: si se consume en exceso, esta sustancia puede favorecer la aparición de zumbidos o pitidos en el oído.

- Grasas saturadas y alimentos ultraprocesados: alimentos con grasas industriales que no aportan nutrientes de calidad.

Además de cuidar nuestra salud auditiva, si evitamos el consumo de estos alimentos también reduciremos la tasa de obesidad infantil. Según los últimos datos de la Vigilancia de la Obesidad Infantil de la OMS (COSI), la obesidad infantil en España afecta a uno de cada cinco niños.

 Este problema de salud también repercute en las deficiencias auditivas ya que el sobrepeso y la obesidad hacen que se ejerza presión sobre las paredes de los capilares, que dificultan el transporte de oxígeno a las células del oído. El exceso de peso también dificulta el bombeo de sangre y puede causar un aumento de la tensión, que podría desembocar en problemas de oído como los acúfenos o los zumbidos.

 

¿Cómo cuidas la salud auditiva de los más pequeños de tu familia? ¡Si tienes dudas o consejos alimentarios, déjanos un comentario!